Estudiar un máster sin tener el grado es una posibilidad muy real.  El mercado educativo es grande y diverso. Por este motivo, existen numerosas posibilidades que pueden adaptarse a todo tipo de estudiantes.

Tener un grado finalizado no es la única manera de poder acceder a un posgrado. Si eres alumno de último curso, aún te queda por certificar el inglés o simplemente estás viendo la luz al final del túnel para acabar la carrera, tienes la oportunidad de cursar un máster.

Estudiar un máster y último año de la carrera

Aunque en la gran mayoría de los casos, los estudiantes suelen cerrar la etapa universitaria antes de cursar un posgrado, existen situaciones en las que el alumno prefiere avanzar más rápidamente y hacer ambas cosas a la vez.

Puede llegar a ser una decisión compleja, por la falta de tiempo, pero también muy satisfactoria ya que te hace avanzar en la mitad de tiempo.

Podríamos resumir las ventajas e inconvenientes en:

Ventajas

• Avanzarás de forma más rápida. Compaginar un sistema práctico con las últimas asignaturas o con el inglés no te resultará complicado.
• Adquirirás conocimientos que te servirán para las últimas asignaturas o viceversa.
• Te relacionarás con personas y adquirirás una cartera de contactos.
• Conocerás un nuevo sistema de docencia y educación.
• Puedes contar con becas para pagar ambas matrículas
• No dejarás un año prácticamente en blanco en lo que refiere a formación.

Inconvenientes

• No podrás tener el título del máster hasta que no tengas el del grado.
• Dispondrás de menos tiempo libre

Cabe destacar, que podrías finalizar el curso y dejar las prácticas para cuando tengas más tiempo libre. En MLAB y la Cámara de Comercio de Sevilla somos conscientes de la dificultad de tiempo que puede tener cursar el grado y Máster a la vez. Por ello, ofrecemos la posibilidad de hacerlas en verano, al año siguiente o cuando el alumno esté disponible.

Si acabas de terminar tus exámenes de diciembre y no sabes que hacer este curso ¡contacta con nosotros e infórmate!